NOTICIA ERROR MEDICO

31-01-2012

 

INDEMNIZAN CON 120.000€ A LA FAMILIA DE UN MUERTO EN UNA CIRUGÍA DE HOMBRO

 

(Comunidad Autonómica Vasca) SALUD | > AREA: Asuntos sociales

31-01-2012 / 17:30 h EFE

La compañía aseguradora de Osakidetza deberá indemnizar con 120.000 euros a la familia de un hombre de 57 años que murió cuando iba a ser sometido a una cirugía en los tejidos de la articulación del hombro derecho, denominada acromioplastia, en el Hospital Comarcal del Bidasoa.

Según ha informado hoy a EFE Salvador Asenjo, letrado de la familia del perjudicado, esta compensación es fruto de un acuerdo alcanzado entre la citada aseguradora y la viuda y los hijos del difunto.

La demanda judicial presentada en su día por los familiares del fallecido, explica que el paciente sufría unas lesiones articulares que iban a ser tratadas mediante la citada acromioplastia, que había sido programada para el 22 de febrero de 2008.

El texto destaca que la intervención se preparó “sin ofrecer al paciente una información mínimamente suficiente sobre los riesgos que la operación iba a suponerle” ni sobre los “riesgos propios de la anestesia que iban a aplicarle”.

El documento recuerda asimismo que se solicitó el consentimiento del enfermo para la práctica de la intervención mediante un documento en el que “ni tan siquiera figuraban las alternativas terapéuticas que habrían podido considerarse para eludir el evidente riesgo de su caso particular”.

Asimismo, aclara que el estudio preoperatorio, preceptivo como instrumento previo para valorar el riesgo de la intervención, fue realizado “de forma notablemente deficiente”.

La demanda concreta que, a pesar de ello, finalmente la operación se inició el 22 de febrero de 2008, aunque “nada más comenzar las primeras maniobras anestésicas, hacia las 10:00 horas, ya empezaron a surgir las primeras complicaciones” que provocaron al paciente “una fibrilación ventricular que hizo necesario conectarle a un respirador artificial e iniciar maniobras de reanimación” que “al principio dieron resultado”.

No obstante, pasados diez minutos, el afectado sufrió “otra nueva crisis cardiaca, acompañada de una disociación electromecánica que se superó con masaje cardíaco” pero que “hizo necesario su inmediato traslado a la Unidad de Vigilancia Intensiva del Hospital Donostia en donde, tras dispensarle durante varios días un tratamiento con el que intentaron su recuperación, falleció a las 9:30 horas del 29 de febrero de 2008”.